
El Sindicato de Oficios Varios de la C.G.T. de Zamora ha denunciado el progresivo desmantelamiento de la red de vigilancia de incendios forestales en Castilla y León, con especial énfasis en Zamora. Según la resolución emitida por la Dirección General de Patrimonio Natural y Política Forestal (DGPN), el operativo INFOCAL sufrirá una reorganización en 2025. Esto implicará la reducción de las torres de vigilancia de 20 a solo 12 en la provincia.
Disminución de empleos
Actualmente, estas 20 torres están operadas por vigilantes de incendios durante las épocas de alto riesgo. Además, desempeñan otras funciones relacionadas con el cuidado del medio natural a lo largo del año. Sin embargo, la medida anunciada por la DGPN también implica la supresión de 8 puestos de trabajo, ya que cada torre será asignada únicamente a dos vigilantes.
La Junta de Castilla y León justifica esta decisión proponiendo el reemplazo de las torres por sistemas de cámaras de vigilancia, cuyo rendimiento ha sido cuestionado por su ineficacia. Tras más de una década de pruebas, las cámaras no han logrado detectar ningún incendio forestal de manera autónoma. A pesar de ello, las autoridades defienden que la vigilancia humana es «ineficaz», basándose en estadísticas que, según el sindicato, manipulan la información. La mayoría de los avisos de incendios se registran a través de llamadas al 112. El análisis de estos datos no distingue entre el primer aviso hecho por un vigilante y las alertas posteriores de la ciudadanía, creando una falsa impresión de mayor eficacia de los sistemas telefónicos.
Decisión errónea
El Sindicato de Oficios Varios de la C.G.T. de Zamora considera esta decisión irresponsable, especialmente a la luz de los trágicos incendios ocurridos en Losacio y la Sierra de la Culebra. En esos incendios, la falta de cobertura de los puestos de vigilancia dificultó la detección temprana de los incendios y la intervención efectiva. Ante esta situación, el sindicato exige que la Junta de Castilla y León rectifique y mantenga intacta la red de torres de vigilancia, operada por personal especializado. Defienden que la vigilancia humada ayuda a evitar consecuencias catastróficas para el medio natural. Además, también preserva el empleo público en zonas ya afectadas por la despoblación.
Además, el sindicato insta al llamamiento de personal fijo-discontinuo que desempeña estas funciones, en un intento de proteger tanto el medio ambiente como los puestos de trabajo. Sobre todo en un territorio que atraviesa graves problemas de despoblación y desempleo.