Se descubre una placa en el edificio de la Casa de Cultura reconociendo la labor humana y cultural a quien es referente para muchas generaciones.
«Un homenaje más que merecido». Así expresaban esta mañana vecinos de Santa Cristina de la Polvorosa momentos antes del solemne acto con el que este pueblo dedicaba la Biblioteca Municipal al recientemente fallecido José Ignacio Primo Martínez.
Merecido por haber sido muy amigo de sus amigos,merecido por su constante preocupación por su pueblo natal y merecido por su afán cultural. Y nada mejor que la corporación municipal con el voto unánime en el Pleno había decidido que el foco de cultura por excelencia, la Biblioteca, llevase su nombre. Una placa en la fachada del edificio de la Casa de Cultura reza así: «Biblioteca Pública Municipal. José Ignacio Primo. En reconocimiento a su labor Humana y Cultural. Santa Cristina de la Polvorosa. 27 de marzo de 2022. Referente para muchas generaciones».
Previamente a descubrir la placa, el alcalde Salvador Domínguez, ante un salón de actos repleto de público, glosó al homenajeado significando el valor de la decisión unánime de los corporativos y del respaldo del vecindario. El primer edil de Santa Cristina recordaba a la madre del homenajeado a título póstumo, a Ursicina Martínez Gallego quien implantó en el año 1959 el foco cultural en Santa Cristina, la primera Biblioteca Municipal de la provincia y, más tarde, impulsó la red provincial de Bibliotecas municipales.
Si el regidor de Santa Cristina quiso rendir un tributo póstumo a José Ignacio Primo, no menos lo hicieron en nombre de la familia, una hermana y una de sus hijas, así como también quiso rendirle homenaje, con un emotivo poema, un discípulo y amigo.
Quien fuera amante y difusor del flamenco, del cante hecho arte, recibía tambén el reconocimiento a cargo del cante de Carmen Esteban y los acordes de guitarra del joven Jorge Portales. Un duo fusión flamenco que llegó a emocionar a más de uno.
Entre los asistentes a este acto de homenaje a José Ignacio Primo se encontraba el Subdelegado del Gobierno, Ángel Blanco y de quien Primo fue estrecho colaborador, el que fuera alcalde de Zamora, Andrés Luis Calvo, así como el procurador José Ignacio Martín Benito y una nutrida representación de amigos del homenajeado. Un vino español en la nave municipal servía para compartir este merecido homenaje invadido por el arte y la cultura, el reconocimiento a un amigo que se fue y permanecerá siempre en Santa Cristina de la Polvorosa.
FOTOS: M. A. C.