Las mascarillas dejan de ser obligatoria en el transporte público, del mismo modo que en ortopedias o en los centros ópticos. La medida ha entrado en vigor este miércoles 8 de febrero tras ser aprobada ayer en el Consejo de Ministros.
Los «cubrebocas» siguen siendo obligatorios en las farmacias y en las residencias, no obstante en este último lugar sólo será obligatorio para los profesionales que trabajen en ellas siempre que estén en contacto con residentes y para los visitantes cuando se encuentren en zonas compartidas. También la obligatoriedad continúa en hospitales, centros sanitarios o clínicas dentales, en centros de reproducción humana asistida, en centros de interrupción voluntaria del embarazo y otros centros de atención especializada.