El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha presentado una propuesta para reducir la tasa de alcohol permitida al volante en España. Esta iniciativa, que busca disminuir el límite actual de 0,5 gramos por litro de sangre a 0,2 gramos, ha recibido un respaldo contundente por parte de víctimas de accidentes, asociaciones de automovilistas y expertos en seguridad vial. La medida se alinea con políticas ya adoptadas en algunos países europeos y tiene como objetivo mejorar la seguridad en las carreteras.
El alcohol, una de las principales causas de accidentes
Uno de los puntos más destacados de esta propuesta es su intención de abordar uno de los problemas más persistentes en la seguridad vial: el consumo de alcohol. Ana Novella, presidenta de la asociación Stop Accidentes, ha celebrado la reducción de la tasa, subrayando que «el lema ‘Si bebes, no conduzcas’ sigue vigente, pero las muertes por esta causa continúan». Novella considera que este cambio es un paso positivo hacia la disminución de accidentes mortales en las carreteras.
Por su parte, Francisco Canes, presidente de la Asociación Estatal de Víctimas de Accidentes (DIA), ha resaltado cómo el alcohol afecta directamente las capacidades visuales y de toma de decisiones al conducir. “El alcohol modifica las capacidades visuales y decisorias, aumentando el riesgo de accidentes”, explicó Canes. Estas limitaciones ponen en peligro tanto al conductor como a otros usuarios de la vía, por lo que ve la propuesta de Marlaska como una medida clave para reducir siniestros.
El apoyo de los automovilistas y expertos en movilidad
La propuesta también ha sido recibida con entusiasmo por Automovilistas Europeos Asociados (AEA), cuyo presidente, Mario Arnaldo, ha expresado su valoración positiva de la reducción. Aunque Arnaldo ha señalado que llevan años abogando por una tasa de alcohol cero, considera que esta reducción a 0,2 es un gran avance en la mejora de la seguridad vial. «La conducción es una actividad que requiere nuestra máxima concentración, y el alcohol es incompatible con ello», afirmó.
Otro respaldo proviene de Juan Luis Antolín, director de comunicación de la consultora PONS Mobility, quien ha señalado que el alcohol sigue siendo una de las principales causas de siniestralidad. Según Antolín, en 2022, el consumo de alcohol estuvo presente en el 14% de los accidentes de tráfico con víctimas y en el 29% de los accidentes con víctimas mortales. La reducción de la tasa de alcohol permitiría disminuir estas cifras de manera significativa.
Inversión en movilidad sostenible
En paralelo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció una inversión de 40 millones de euros para promover el uso de la bicicleta en España, una medida que ha sido recibida positivamente por diversos actores. Mario Arnaldo considera que, aunque esta inversión es «oportuna», debería complementarse con soluciones al problema de los vehículos antiguos en zonas de bajas emisiones.
Asimismo, la presidenta de Stop Accidentes ha pedido que se regule un seguro obligatorio para ciclistas, con el fin de proteger a las víctimas en caso de atropellos. Este aspecto es compartido por Francisco Canes, quien considera que un seguro para ciclistas es esencial para que el uso de la bicicleta sea seguro tanto para los usuarios como para los peatones.
Por su parte, Ramón Ledesma, consejero de PONS Mobility, cree que la inversión en bicicletas es un paso en la dirección correcta, especialmente después de la reducción de la velocidad urbana a 30 km/h en 2021. Sin embargo, Ledesma ha recordado la importancia de seguir mejorando la infraestructura ciclista, como la creación de carriles bici y más espacios de aparcamiento, para garantizar una integración adecuada de las bicicletas en la ciudad.